LOS TIEMPOS DE ADVIENTO y Navidad son una época de tradiciones familiares, culturales, y de la Iglesia. Si bien lo que hacemos año tras año es importante, las tradiciones en sí mismas no son lo que estamos celebrando. Todas podrían terminar y tanto Navidad como Adviento aún tendrían sentido. Si decoramos un árbol o no, si cantamos villancicos o no, podemos decir con alegría y esperanza que Cristo nació en Belén. Al crecer en San Francisco, la tradición más importante de mi familia fue el tiempo que pasamos con la familia. Después de la Misa el día de Navidad, mis padres y los siete niños íbamos a la casa de mis tíos y tías, con sus seis hijos, para la cena. Esas grandes cenas familiares fueron una parte importante de cómo pienso acerca de la Navidad.
EN EL MES DE NOVIEMBRE, la Iglesia conmemora a los fieles difuntos, nuestros queridos hermanos y hermanas que han muerto con la esperanza de la resurrección. Ofrecemos oraciones por ellos y estamos llamados a contemplar nuestra propia muerte. Los cristianos medievales conocían íntimamente las palabras memento mori, tempus fugit: recuerden la muerte, el tiempo vuela. La perspectiva católica, hasta el día de hoy, no teme a la muerte como el fin, sino como la bisagra entre la tierra y la vida eterna donde enfrentamos el juicio. Al contemplar la muerte, contemplamos nuestra relación con nuestro Creador.
In November, the Church commemorates the faithful departed, our beloved brothers and sisters who have died in the hope of the Resurrection. We offer prayers for them, and we are called to contemplate our own death. Medieval Christians knew intimately the words memento mori, tempus fugit - "remember death, time flies." The Catholic outlook, to this day, does not fear death as the end; we see it as the hinge between earth and life eternal, where we face judgment. In contemplating death, we contemplate our relationship with our Creator.
In the month of October, we traditionally honor Mary, and no devotion is as popular as the rosary. Historically, this has been one of the most loved practices in Catholic devotion, taking different forms throughout the centuries. The rosary that most of us are familiar with praying is known as the Dominican Rosary. As originally developed, it consists of three sets of five mysteries, with each mystery containing a decade (or set of 10) of Hail Mary prayers, totaling 150.
En el mes de octubre, tradicionalmente honramos a María, y ninguna devoción es tan popular como el rosario. Históricamente, esta ha sido una de las prácticas más queridas en la devoción católica, tomando diferentes formas a lo largo de los siglos. El rosario que la mayoría de nosotros estamos familiarizados con la oración se conoce como el rosario dominico. Cuando se desarrolló originalmente, constaba de tres conjuntos de cinco misterios, cada uno de los cuales contiene una decena (o un conjunto de 10) de Avemarías, un total de 150.
The Christian life is at its root a response to God’s work. In the beginning, God created us; He loved us into existence. Born as a helpless infant, in His Incarnation He united His life with ours. In His cross, Jesus abandoned Himself to the worst that humanity could throw at Him, all for the love of us. In His resurrection, He has given us hope of eternal life.
La vida Cristiana es en su raíz una respuesta a la obra de Dios. En el principio, Dios nos creó; él nos amó a la existencia. Nacido como infante indefenso, en su encarnación unió su vida con la nuestra. En su cruz, Jesús se abandonó a lo peor que la humanidad podía arrojarle, todo por amor a nosotros. En su resurrección, él nos ha dado esperanza de vida eterna.
I recently received a note from Sean, who is a student at St. Charles Catholic School in Spokane. Sean painted the cover of the note card with the scene of Jesus walking on the water, which we find in the Gospels. The apostles were caught in a storm and, as they saw Jesus walking toward them on the water, they thought he was a ghost. They were filled with fear and anxiety. Despite their lack of faith, the Lord calmed the storm and restored peace in their hearts.
Recientemente recibí una nota de sean, quien es un estudiante en la Escuela Católica de San Carlos Borromeo en Spokane. Sean dibujó en la portada de una tarjeta la escena de Jesús caminando sobre el agua, que encontramos en los Evangelios. Los apóstoles estaban atrapados en una tormenta y, al ver a Jesús caminando hacia ellos en el agua, pensaron que era un fantasma. Estaban llenos de miedo y ansiedad. A pesar de su falta de fe, el Señor calmó la tormenta y restauró la paz en sus corazones.
En este mes de mayo, ordenaré al Diácono Raymond Kalema al sacerdocio. Como seminarista de la Diócesis de Spokane, la ordenación del Diácono Kalema llega al nalde un viaje de discernimiento y es una ocasión de gran alegría para él, su familia y para toda la diócesis.
In May, I will ordain Deacon Raymond Kalema to the priesthood. As a seminarian of the Diocese of Spokane, Deacon Kalema’s ordination comes at the end of a journey of discernment and is an occasion of great joy for him, his family and for the entire diocese.
Así como la Cuaresma es un tiempo de abnegación, la Pascua es un momento para regocijarse. El patrón de ayuno y fiesta se ve a lo largo del calendario litúrgico de la Iglesia. Es apropiado que el día más penitencial del año litúrgico sea justo antes del más feliz, es decir, el Viernes Santo antes de la Pascua.
As Lent is a time of self-denial, Easter is a time for rejoicing. The pattern of fast and feast is seen throughout the Church’s liturgical calendar. It is fitting the most penitential day of the liturgical year comes just before the most joyous — Good Friday before Easter.
A principios de febrero, escribí una carta a la diócesis en referencia al auge de la legislación extrema a favor del aborto que se está considerando en varios estados. La carta, que atrajo la atención local y nacional en la prensa, no pretendía ser una carta política.
At the beginning of February, I wrote a letter to the diocese concerning the upsurge of extreme pro-abortion legislation being considered in several states. The letter, which drew local and national attention in the press, was not intended as a political letter.
El 11 de febrero de 1858, una adolescente llamada Bernadette Soubirous fue testigo de una aparición de lo que ella describió como “una dama” en una gruta en Lourdes, Francia.
On February 11, 1858, a teenage girl by the name of Bernadette Soubirous witnessed an apparition from what she described as “a lady” at a grotto in Lourdes, France.
Una de las figuras centrales durante el tiempo de Adviento y de Navidad es, por supuesto, la Santísima Virgen María. Celebramos a María en la Liturgia de la Misa en las fiestas de la Inmaculada Concepción y de Nuestra Señora de Guadalupe.
One of the central figures during the seasons of Advent and Christmas is, of course, the Blessed Virgin Mary. We celebrate Mary in the liturgy with the feasts of the Immaculate Conception and Our Lady of Guadalupe. The Gospel of Luke calls our attention to the visitation of our Blessed Mother to her cousin Elizabeth and the Christmas readings highlight Mary's central role as the mother of our savior.